Suele decirse que la época estival no es el momento propicio para la búsqueda laboral, debido al concepto de que las empresas tienen menos necesidades de personal. No es necesario esperar a que comience el año laboral en marzo y que finalicen los dos meses más fuertes de las vacaciones para poder ingresar en una empresa. Hay situaciones y requerimientos especiales que se dan en esta etapa del año y es el momento indicado para insertarse en el mercado laboral para demostrar todo el talento y el potencial que tenemos para dar.
En las empresas se suele tomar personal eventual para cubrir determinados periodos vacacionales, algunos sectores en particular se ven mermados de personal en enero y febrero ya que los empleados de mayor antigüedad suelen tomar estos meses para el descanso y tienen mayor carga de días de licencia que los más modernos. "Los meses de verano son una buena ocasión para insertarse en las empresas y para perfeccionarse dentro de las mismas, son muchos los jóvenes que ingresan a empresas para cubrir vacaciones de forma eventual y al poco tiempo son llamados para quedar efectivos", señala Ricardo Wachowicz, presidente de la firma Bayton con más de 34 años de experiencia en recursos humanos.
La modalidad de empleo eventual es una de las más utilizadas por las empresas para la cobertura de bajas y licencias, en muchos de estos casos se apunta jóvenes que ingresan al mercado laboral a forjar sus experiencias, de esta manera el ingresante cuenta con la posibilidad de trabajar en más de una empresa y de adquirir conocimientos en muy poco tiempo.
El trabajo temporario como modalidad de contratación está homologada por el Ministerio de Trabajo de la Nación, es empleo registrado y tiene triple garantía para el trabajador. La tasa de efectivización es superior al 30% y es una de las principales fuentes de creación de empleo joven.